Las aulas como el resto de las diferentes áreas en el mundo de hoy, se han visto obligadas a adoptar progresivamente la tecnología en el proceso enseñanza aprendizaje.  Sin embargo, el concepto de equipar las aulas con dispositivos conectados ciertamente no es nada nuevo. La realidad es que los dispositivos tecnológicos de los estudiantes a menudo se ha tímin ido incorporado tímidamente, pero aún no se aprovechan al máximo. Precisamente porque a veces se consideran como una distracción o en el mejor de los casos como un complemento. Esto, en lugar de darles su lugar como herramientas que son esenciales para la enseñanza y el aprendizaje.

Desde hace algún tiempo, muchas escuelas y universidades han confiado tanto en las computadoras de escritorio como en las computadoras portátiles. Pero esta solución ha sido engorrosa, no sólo por los costos que esto implica sino también por el hecho de que los profesores no pueden contar con estas herramientas cada vez de las necesiten. En muchos casos estos equipos son compartidos por varias aulas y no es posible saber si las computadoras funcionarán adecuadamente cuando las necesitaran.

Algunas escuelas han desarrollado exitosamente laboratorios de computación, pero a otras les ha resultado casi imposible administrar un entorno informático donde cada estudiante tenga un dispositivo diferente. Incluso en aquellas que si cuentan con un dispositivo por alumno, les ha resultado difícil continuar financiando los programas con el tiempo. Otras no lograron las actualizaciones necesarias para garantizar un alto nivel de rendimiento.

Los entornos de aprendizaje modernos están diseñados para que los estudiantes tendrían acceso constante a la conectividad. De la misma manera, según el Consejo Nacional de Investigación de Estados Unidades (2000), deben estar respaldados por la tecnología de fondo. Deben contar además con la capacitación de docentes para garantizar que los dispositivos de los estudiantes se utilicen adecuadamente en el aula.

La Tecnología y el Ambiente de Enseñanza Aprendizaje en la época del COVID19

Como podemos ver la solución no es sencilla. Muchas escuelas y universidades se han opuesto al uso de las propias herramientas del estudiante en el aula ya sea tablets o teléfonos móviles. Igualmente, aunque cuenten con los equipos en el aula, la conexión a Internet el 100% del tiempo de estudio, no es posible. Sin embargo, ya se ha probado que las las soluciones audiovisuales en el aula apoyan directamente el aprendizaje y la participación de los estudiantes.

En el entorno actual, con la cuarentena consecuencia del COVID19, se ha reinventado el proceso de enseñanza aprendizaje y se ha instaurado la tecnología en casi todas las áreas donde aún no estaba presente. Además se ha venido a reinvidicar el acceso a Internet por parte de los niños y adolescentes, como medio para la realización de sus actividades.  Dependiendo del grado y los objetivos de instrucción, estas soluciones pueden incluir además pizarras interactivas, cámaras fotográficas. De la misma manera, se sugieren el uso de pantallas digitales multitáctiles, proyectores e incluso cintas y CDs de audio y video. La clave no es implementar una herramienta audiovisual única con un enfoque único, sino más bien equipar las aulas con varias soluciones. Estas ayudarían a los profesores a llegar a sus alumnos, incluso cuando no están en el aula.

Antecedentes del uso de las tecnologías informáticas en el aula

Los intentos de utilizar tecnologías informáticas para mejorar el aprendizaje han estado presentes desde antes del uso generalizado de las computadoras personales. De acuerdo con Hernández (2000), comenzaron con los esfuerzos de pioneros como Atkinson y Suppes desde el año 1968. La presencia de tecnología informática en las escuelas y universidades ha aumentado dramáticamente desde entonces y las predicciones indican que esta tendencia continuará acelerándose. Existe la visión generalizada de que la tecnología mejorará el aprendizaje y el rendimiento de los estudiantes. Sin embargo, algunos todavía opinan que la tecnología en el aula es una pérdida de tiempo y dinero, ya que su mantenimiento resulta muy costoso. De lo que estamos seguros es que tiene un gran potencial para mejorar el rendimiento de los estudiantes y el aprendizaje de los docentes, pero sólo si se usa adecuadamente.

Lo que ahora se sabe sobre el aprendizaje proporciona pautas importantes para que el uso de la tecnología pueda ayudar a los estudiantes y profesores a desarrollar las competencias necesarias para el siglo XXI. Las nuevas tecnologías brindan oportunidades para crear entornos de aprendizaje.  Esto amplía las posibilidades que nos dan los libros, pizarras y otros medios de comunicación. Estos son lineales y unidireccionales, como programas de radio y televisión, a diferencia de la tecnología que nos ofrece nuevas posibilidades.

Sin embargo, el sólo uso de la tecnología no garantizan un aprendizaje efectivo. Los usos inapropiados de la tecnología pueden dificultar el aprendizaje. Por ejemplo, si los estudiantes pasan la mayor parte de su tiempo eligiendo fuentes y colores para informe. El tiempo debe aprovecharse para planificar, escribir y revisar sus ideas. Muchos aspectos de la tecnología facilitan la creación de entornos que se ajusten a los principios de aprendizaje.

Beneficios de la Tecnología en el Ambiente Enseñanza Aprendizaje

Debido a que muchas nuevas tecnologías son interactivas, ahora es más fácil crear entornos en los que los estudiantes puedan aprender haciendo. Además pueden recibir comentarios y refinar continuamente su comprensión y desarrollar nuevos conocimientos. De la misma manera, pueden comunicarse con sus profesores en video o por via chat, en los momentos designados para ello.

Las nuevas tecnologías también pueden ayudar a las personas a visualizar conceptos difíciles de entender, con el uso de gráficos o con software de visualización y modelado, aumentando su comprensión. Estas tecnologías también proporcionan acceso a una gran variedad de información, incluidas las bibliotecas digitales, bases de datos y propiciar el contacto con otras personas que les puedan brindar información, comentarios e inspiración. De la misma manera, pueden mejorar la capacitación de los profesores y administradores de escuelas y aumentar las conexiones entre los entornos educativos y las comunidades, incluidos los hogares.

Al respecto, los beneficios de la tecnología en el ambiente enseñanza aprendizaje se puede resumir de cuatro maneras:

  • Proporcionando herramientas para mejorar el aprendizaje;
  • Dando a los estudiantes y profesores más oportunidades para retroalimentación, reflexión y revisión;
  • Construyendo puentes entre las escuelas, universidades y las comunidades incluyendo profesores, administradores, estudiantes, científicos en ejercicio y otras personas interesadas; y
  • Expandiendo las oportunidades para la capacitación del profesorado.

Hacia un nuevo currículo

Un uso importante de la tecnología es su capacidad para crear nuevas oportunidades para la actualización del currículo. Trae problemas del mundo real al aula para que los estudiantes los exploren y resuelvan. De igual manera, la tecnología puede ayudar a crear un entorno activo. En este los estudiantes también encuentren nuevos problemas por resolver por cuenta propia. Este enfoque de aprendizaje es muy diferente de las aulas típicas, en las que los estudiantes pasaban la mayor parte de su tiempo aprendiendo hechos desde la explicación del profesor o desde su libro de texto. O resolviendo las preguntas al final cada tema.

Aprender a través de contextos del mundo real no es una idea nueva. Durante mucho tiempo, las escuelas y universidades han realizado esfuerzos esporádicos al respecto. Estos se han centrado en brindar a los estudiantes experiencias concretas a través de excursiones, laboratorios y programas de trabajo comunitario. Pero estas actividades rara vez han estado en el centro de currículo. No se han incorporado fácilmente en las escuelas y universidades debido a las limitaciones logísticas o a la cantidad de materia que se debe cubrir. La tecnología ofrece herramientas poderosas para abordar estas limitaciones.

La tecnología ha cambiado el proceso enseñanza aprendizaje para siempre

Las herramientas tecnológicas marcan el comienzo de cambios estructurales fundamentales que pueden ser integrales para lograr mejoras significativas en la productividad. Igualmente expande las ofertas de cursos, experiencias y materiales de aprendizaje. Igualmente, apoya el proceso las 24 horas del día, los 7 días de la semana, desarrolla habilidades del siglo XXI y aumenta el compromiso y la motivación de los estudiantes. La tecnología también tiene el poder de transformar la enseñanza al introducir un nuevo modelo de enseñanza conectada. Este modelo vincula a los docentes con sus alumnos y además, personaliza el aprendizaje.

Según Molina (2003), las oportunidades de aprendizaje en línea y el uso de recursos educativos abiertos y otras tecnologías pueden aumentar la productividad educativa al acelerar la tasa de aprendizaje. Además, reduce los costos asociados con materiales de instrucción y  aprovecha el tiempo del profesor. Los libros electrónicos de calificaciones, las carpetas digitales, los juegos de aprendizaje en línea y los comentarios en tiempo real sobre el desempeño de los profesor y los estudiantes, son algunas de las formas en que la tecnología se puede utilizar para impulsar el aprendizaje.

Sabemos lo complicado que puede ser el uso de todas estas herramientas tecnológicas tanto para el desarrollo de trabajos monográficos, como para trabajos especiales de grado. En Online-Tesis.com, estamos para ayudarte. Cualquiera sea el trabajo especial que necesites desarrollar, podemos brindarte asesoría.

Conclusiones

La tecnología se ha convertido en un instrumento importante en la educación. Su uso es muy prometedor tanto para aumentar el acceso al conocimiento como para promover el aprendizaje. Con el nuevo contexto del COVID19, los profesores han visto de primera mano todas las posibilidades que proporciona Internet. Esta vincula a los estudiantes de todo el mundo con un amplio mundo de información útil al alcance de sus manos y con amplias posiibilidades de comunicación.

Pueden ser así poderosas herramientas pedagógicas, no sólo fuentes de información, sino también extensiones de las capacidades y contextos para las interacciones sociales que apoyan el aprendizaje. Sin embargo, se debe tener en cuenta que no es sólo una cuestión técnica referida a las propiedades del hardware y software educativo. Se requiere el apoyo de los profesores. Al igual que un libro de texto o cualquier otro objeto cultural, los recursos tecnológicos para la educación, funcionan en un entorno social. Este debe ser mediado por conversaciones de aprendizaje con los facilitadores del mismo.

Sin embargo, estas herramientas de apoyo aún no se han convertido en la norma. Los programadores de software para niños y adolescentes generalmente están más impulsados ​​por el mercado de juegos que por el potencial de aprendizaje de sus productos. Los expertos en informática, los expertos en aprendizaje y los planificadores de políticas educativas, deben asumir el desafío de explotar el potencial de las tecnologías informáticas para mejorar el aprendizaje. Queda mucho por aprender sobre el uso del potencial de la tecnología. Para que esto suceda, la investigación del aprendizaje deberá estar de la mano de la programación.

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Referencias Bibliográficas

Consejo Nacional de Investigación (2000). Tecnologías para apoyar el aprendizaje. Cómo aprende la gente: cerebro, mente, experiencia y escuela: Edición ampliada. Washington, DC: The National Academies Press.

Hernández, A (2000). La enseñanza de estrategias de aprendizaje. Revista Actas Pedagógicas, Ibagué, Colombia.

Molina, E. (2003). Análisis comparado de la formación práctica en el sistema universitario como base de evaluación y mejora. Equipo de investigación FORCE Universidad de Granada y Grupo DOE. Universidad Rovira I Virgili.

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